Ana María Loyola Ramírez, enfrenta un cáncer avanzado que requiere cuidados permanentes. Su hijo dejó su trabajo para convertirse en su cuidador principal y, mientras la acompaña, genera ingresos a través de su arte en madera y dibujo. La familia vive únicamente con las pensiones PGU de Ana y su esposo, por lo que sus recursos son muy limitados. Apoyarles es esencial para asegurar su derecho a una vida digna, estabilidad y bienestar en un momento de alta demanda emocional y económica.
¿Qué se necesita? Aporta lo que puedas: Alimentos no perecibles Compra o difusión del arte del hijo de Ana
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