Cuenta Pública 2024: Pura transparencia
A la Cuenta Pública, realizada en el tradicional Café Torres, acudieron líderes y referentes del sector social y empresarial. Entre ellos Guillermo Tagle, presidente de la Fundación Teletón; Charles Kimber, Gerente Corporativo de Personas y Sustentabilidad de Arauco; Consuelo Polanco de Juntos en la Calle; María Paz Vega de Fundación Padre Hurtado; Camila Salas de Jesuitas Chile; y representantes de organizaciones como Fondo Esperanza, Fundación Colunga y Servicio Jesuita a Migrantes, además de directivos y colaboradores del propio Hogar de Cristo. Magdalena Piñera y otros actores clave del mundo de la solidaridad y la filantropía dieron un marco especial a la actividad.
Durante la Cuenta Pública, el director ejecutivo del Hogar de Cristo, Juan Cristóbal Romero, destacó el impacto de los 238 programas desplegados en todo el país, que permitieron acompañar a 38.635 personas el año pasado. “Trabajamos para superar la pobreza en todas sus dimensiones. Atendemos a niños, jóvenes, personas mayores, personas en situación de calle, con discapacidad mental, abordando vivienda, educación, trabajo, salud y cohesión social. El desafío es enorme, pero nuestra misión es clara: mejorar las condiciones de vida y promover la integración social”.
MEMORIAS PÚBLICAS DESDE 2016
Uno de los focos de la Cuenta Pública fue la transparencia y la rigurosidad en la gestión. “Desde 2013, somos la primera fundación del país en adherir a los estándares del Consejo para la Transparencia. Hoy, nuestra memoria anual pública y los procesos de auditoría externa reflejan ese compromiso con la rendición de cuentas y la confianza de nuestros más de 361 mil socios”, subrayó el director ejecutivo.
En 2024, Hogar de Cristo atendió a casi 39.000 personas de extrema pobreza y vulnerabilidad, en 238 programas sociales, que incluyen salas cunas y jardines infantiles, escuelas de reingreso, hogares protegidos para personas con discapacidad mental, hospederías para personas en situación de calle, atención domiciliaria para adultos mayores, programas de inclusión laboral, consumo problemático y centros diurnos. Así, la organización abarca los problemas más apremiantes de la pobreza en todas las etapas de la vida.
En 2013, Hogar de Cristo se convirtió en la primera fundación del país en vincularse con el Consejo para la Transparencia para cumplir con la Ley de Transparencia de la Función Pública y de Acceso a la Información, elevando así sus estándares de control. Hoy cuenta con la asesoría de Chile Transparente. La memoria anual pública es un ejemplo de esa transparencia y viene realizándose como tal desde 2016.
LAS PERSONAS AL CENTRO
Juan Cristóbal Romero también puso especial énfasis en la Nueva Estrategia Social de Hogar de Cristo, que busca profundizar el trabajo colaborativo con el Estado, las empresas y otras organizaciones sociales, promoviendo modelos de atención basados en evidencia, escalables y con incidencia real en las políticas públicas. “Estamos frente al proceso más profundo de transformación que ha vivido en el Hogar de Cristo en las últimas décadas. No se trata de un cambio administrativo ni de una reestructuración puntual. Se trata de replantear cómo enfrentamos la pobreza en Chile, en un contexto completamente distinto al que existía cuando nacimos como fundación, hace 80 años”, sostuvo.
Liliana Cortés, directora social nacional, resaltó el regreso del Hogar de Cristo a los territorios y comunidades. “Volvemos a lo esencial: acompañar y escuchar a las personas. El dolor de ellas debe ser nuestro dolor. Esa es la razón por la que existimos y el motor de nuestra acción social”.
El cierre de la jornada estuvo a cargo del capellán general, José Francisco Yuraszeck, quien agradeció a todos quienes hacen posible la labor del Hogar de Cristo. “Hay ciertas cosas que se pueden pagar, pero muchísimas otras que no. El cariño, la entrega y el compromiso de quienes aquí trabajan y colaboran no tiene precio. Solo compartiendo y poniendo acento en las personas podremos transformar Chile. Ese es el legado de nuestro fundador, el padre Hurtado, y el faro ético que nos guía desde hace 80 años”.
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