20 Marzo 2018 a las 09:30
Más de cien estudiantes de las carreras de publicidad, cine y periodismo de la Universidad del Desarrollo se reunieron en el Hogar de Cristo para conocer el trabajo de la institución. La charla fue liderada por el capellán Pablo Walker y el director social nacional, Paulo Egenau. ¿El motivo? Los jóvenes, todos de segundo año, serán los encargados de crear, diseñar y ejecutar una campaña de crowdfunding o red de financiamiento colectivo con el objetivo de reunir fondos para 22 causas o iniciativas sociales de la organización.
En su tercer año de trabajo en conjunto, este 2018 el crowdfunding beneficiará a 14 proyectos de las Fundaciones Hogar de Cristo y a 8 agrupaciones de Acción Solidaria, esta última es una de la causas de la institución que promueve diferentes emprendimientos e ideas locales.
Entre las iniciativas a financiar este año están la creación de una rampa de acceso para las personas en situación de calle que asisten a la Casa de Acogida en San Bernardo y un invernadero terapéutico para acogidos de Rostros Nuevos, fundación que trabaja con adultos con discapacidad mental, entre muchas otras iniciativas. Luis Ossa, subdirector de Acción Solidaria, área que este año lidera y coordina el crowdfunding, nos cuenta.
-¿Cuál fue el objetivo de la charla?
-La idea es tener un espacio donde los jóvenes que van a participar del proyecto de financiamiento colectivo logren comprender y empaparse de la mirada que en el Hogar de Cristo tenemos acerca de las distintas realidades con las que trabajamos. Empaparse de una mirada acerca de la pobreza, no basada en la carencia, sino como una vulneración de derechos. No se puede no mirar la situación de calle como una opción de las personas; hay que entenderla en su contexto y desde la exclusión social. Lo que intentamos es acercarnos al relato que nosotros creemos que es el correcto para poder abordar la pobreza. En este primer proceso, los jóvenes deben empaparse de la realidad de la pobreza desde esta perspectiva, porque lo que viene después es la ida a terreno; queremos que vayan cuestionando, reflexionando y mirando la realidad de una manera distinta. Y así, lograr una campaña que logre efectivamente transformar. Si ellos no se transforman a sí mismos con esta realidad, es difícil que transformen a otros. Si ellos no están sensibles, es difícil que sensibilicen a otros.
-Este es el tercer año que se desarrolla este programa.
-Sí. Y este año lo estamos tomando desde Acción Solidaria. Ha ha sido una bonita experiencia donde los estudiantes pueden involucrarse en temas de pobreza, no haciendo un voluntariado tradicional sino desde sus respectivas disciplinas. Dando un producto o una propuesta que tiene que ver con un producto académico, que les sirve para avanzar en un ramo que tienen en la universidad, pero que por otro parte es una forma de instalarse en la sociedad, generando cambios desde su propia disciplina.
-Hay cambios con respecto al año pasado.
Sí, dentro de ellos, te puedo señalar que por primera vez participan ocho organizaciones de Acción Solidaria, que son pequeñas iniciativas de la Región Metropolitana, fundaciones chiquititas, grupos de voluntarios, que tienen unas propuestas muy interesantes de apoyo con los más pobres, los más excluidos. Nosotros estamos invitándolos a que algunos de sus problemas puedan resolverlos con el dinero que se junte. Además, van a tener la posibilidad de tener un video, una campaña con lo que ellos hacen. Por lo tanto es totalmente ganar-ganar, tanto para las agrupaciones como para los estudiantes y para nosotros.
-¿Cuál es el plazo de entrega de los trabajos?
-Van a estar trabajando durante todo el semestre y la campaña se inicia en junio. Para entonces, no sólo hay que tener el video, sino una red, una estrategia para llegar a distintos mundos que podrían cooperar. Porque en definitiva esto es una campaña de búsqueda de financiamiento entre muchos, para distintas causas. En junio nos jugamos el todo por el todo, para ver los resultados de lo que estamos sembrando ahora. Y a fines de junio sabremos quiénes son las causas que lograron juntar más dinero.
-¿Todas las iniciativas participan?
-A diferencia de otros proyectos de crowdfunding, donde sólo se llevan las lucas los que juntan la plata, acá está pensado que las iniciativas se lleven el porcentaje que logren de la meta fijada. Queremos llegar con todas al ciento por ciento, incluso más. Pero si no se junta la totalidad, igual son platas que se le van a entregar a la organización para que puedan ocuparla y disponer de ella para resolver al menos parte del problema que tienen.
RECUADRO
Hablan los involucrados.
Calú Sarroca, docente de responsabilidad pública.
“Estamos enfocados en la experiencia de cada alumno, en la conexión de cada uno con las causas sociales. Con acercarlos a ciertas realidades y que puedan abrir su corazón hacia esas necesidades. Este año veo que están mucho más receptivos, veo a personas con más vocación, los siento mucho más abiertos. No sé si es por una situación mundial que tiene que ver con las redes sociales, con los me gusta, con las ganas de esta generación por ayudarse”.
Carla Flores, segundo año de cine.
“Conocía el Hogar de Cristo, pero nunca había venido para acá porque soy de Antofagasta, pero sí había sido voluntaria. El desafío me pareció difícil al principio, lo de juntar dinero, pero creo que con el grupo lo vamos a conseguir”.
Pilar Troncoso, ayudante de responsabilidad pública y participante de crowdfunding 2017.
“La experiencia del año pasado fue muy entretenida, quedé con el pecho inflado de orgullo. Me enamoré de las niñas, me tocó ropa de cama para una residencia para niñas y fue muy bueno. No sabía que el Hogar de Cristo tenía niños, pensaba que era sólo eran adultos mayores. Me enteré de todas las causas que tenían y me encantó la experiencia. Lo que quiero transmitir este año, como ayudante, es que lo hagan más que por una nota”.